Estadio de fútbol Nacional Mateo Flores.

Estadio Nacional Mateo Flores:

El Estadio Nacional Mateo Flores es un recinto deportivo localizado en la Ciudad de Guatemala en Guatemala. Su dirección es 10 avenida de la zona 5. Es el estadio más grande de Guatemala y el séptimo a nivel centroamericano. Fue construido en 1948, para acoger los Juegos Centroamericanos y del Caribe en 1950, se le dio este nombre en memoria del corredor de larga distancia Mateo Flores, ganador del Maratón de Boston[1] en 1952. En el año 2000 su aforo oficial era de 30.000 espectadores pero al colocarse butacas en todos sus sectores la capacidad se redujo a 25.000.

Se utiliza principalmente para partidos de fútbol, el estadio ha acogido a la mayoría de los partidos de local de la Selección nacional de fútbol a lo largo de su historia, y es el hogar del club CSD Municipal. El lugar es operado por la Confederación Deportiva Autónoma de Guatemala (CDAG).

Uno de los peores desastres ocurridos en un evento deportivo en Guatemala ocurrió en este estadio en 1996, cuando 83 personas murieron debido a una avalancha humana en las gradas.

Descripción general:

La gramilla del campo Mateo Flores está rodeada por una pista de ocho carriles de atletismo, que inicialmente se hizo de arena, y más tarde fue remodelada para tener una superficie sintética de tartán. La zona de asientos está dividida en cinco secciones: Palco (situado en el oeste, y la única sección con techo), Tribuna (oeste, que rodea el Palco), Preferencia (este), General Norte (norte), y el General Sur (al sur, donde se encuentra la entrada principal).

Historia:

El estadio fue construido en 1948, como parte del proyecto para construir un grupo de instalaciones deportivas conocido como Ciudad Olímpica, en la Zona 5 de la capital guatemalteca. Originalmente llamado Estadio Olímpico - por error, ya que nunca ha acogido una competición olímpica -, es en primer lugar construido de hormigón armado, razón por la cual a veces es coloquialmente denominado Coloso de concreto. Se inauguró el 18 de agosto de 1950, para acoger los VI Juegos Centroamericanos y del Caribe, en los que el corredor local Doroteo (Mateo) Flores ganó el medio maratón.

Después que Mateo Flores triunfo en el Maratón de Boston en 1952, el gobierno guatemalteco cambió el nombre del estadio, en reconocimiento a sus logros a nivel nacional e internacional. Desde entonces, el estadio es también coloquialmente llamado El Mateo.

En 1967, la Selección de fútbol de Guatemala ganó el Campeonato NORCECA, predecesor de la Copa de Oro de la CONCACAF. Todos los partidos del torneo se jugaron en el Mateo Flores.

En 1973, el estadio fue anfitrión de los primeros Juegos Deportivos Centroamericanos, y desde entonces ha sido sede de otras dos ediciones, en 1986 y 2001.

La noche del 5 de Marzo de 2010 el estadio fue sede del evento de Rock mas grande que ha ocurrido en suelo guatemalteco, al presentarse ante un publico de casi 30000 asistentes el grupo de thrash, Metallica.

A lo largo de los años, el estadio también ha sido la meta final de la anual Vuelta a Guatemala, principal competición ciclista en Centroamerica.

El Desastre del 16 de octubre:

El 16 de octubre de 1996, minutos antes del partido que iba a tener lugar entre Guatemala y Costa Rica, juego por la clasificación a la copa del mundo de la FIFA 1998, 83 personas resultaron muertas y más de 200 heridos cuando un número excesivo de aficionados trataron de entrar en la sección General Sur, se creó una avalancha humana en la parte inferior de las gradas, que está separada del campo por una valla. La venta de falsificaciones de billetes llevó a un exceso de asistencia del público, y el inadecuado diseño del edificio en caso de una emergencia causo la estampida de aficionados y la caída en sí, causando a muchas personas asfixia, en una de las peores tragedias nunca antes vista en un estadio deportivo.

El partido de fútbol fue inmediatamente suspendido por el Presidente de Guatemala Álvaro Arzú, que asistía al evento, y la FIFA suspendió el uso de la cancha para partidos internacionales oficiales hasta que las cuestiones de seguridad fueran resueltas, una prohibición que duró más de dos años. Algunos de los problemas se siguieron abordando, ya que, las instalaciones aún presentan varios problemas de seguridad relacionados con el acceso y salida, y se considera propenso a la aparición de otra situación de emergencia en caso de alta participación.

Se cree que cerca de 50.000 personas estaban tratando de asistir al estadio ese día, cuando días antes del evento se habían decidido que se iba a tener una capacidad para 37.500 personas y un máximo de "congestión" de 47.500 asientos. De acuerdo con un análisis local, el número de billetes impresos topaba la capacidad del estadio, y la circulación de la falsificación de billetes hizo que el exceso de asistencia fuera incontrollable. Hasta el momento, 13 directores administrativos fueron sindicados como responsables de las muertes y lesiones, pero cada uno de ellos pudieron ser desestimados de los cargos. La CDAG no asume responsabilidad por la seguridad de la instalación, alegando que es deber de las entidades que organizan los eventos deportivos. La CDAG, sin embargo, no ofrece una base de contingencia o plan de emergencia para el uso de la cancha.

Para cumplir con algunas de las recomendaciones hechas por la FIFA tras los acontecimientos de 1996, la capacidad del estadio - que no tenía asientos individuales o numerados - se redujo a 30000 en el 2000.