Historia - La Petrolera - Zulia

Historia de la barra brava La Petrolera y hinchada del club de fútbol Zulia de Venezuela

El gusto y el amor por el fútbol, las ganas de alentar al equipo del patio y la creatividad e imaginación impulsaron a un grupo dejóvenes, liderados por Gerardo Urdaneta, a poner su grano de arena en el 2011 para darle apoyo al único equipo de la primera división que, entonces, no tenía barra.

Así surgió la iniciativa de la “Barra Petrolera”, como se hace llamar el grupo de fanáticos que un 16 de octubre, pero del 2011, decidió alojarse domingo tras domingo en la tribuna sur del José Encarnación “Pachencho” Romero para aupar al Zulia FC, el único equipo de la región en la división de oro del balompié venezolano.

“Siempre fui seguidor del Zulia FC, tengo muchos amigos y conocidos que jugaron en las menores. Uno de ellos llegó al primer equipo como juvenil sub20, pero no pudo mantenerse y desde ese entonces íbamos a formar parte delespectáculo desde el público. Mis amigos me impulsaron a formar una barra, diciéndome que tengo madera para animar, que siempre me gustó el equipo y que el Zulia era para el momento el único de la Primera sin una barra”, rememora Gerardo Urdaneta, líder de la “Petrolera”, sobre los inicios.

“Entre todos reunimos dinero, unos pusieron la pintura, yo puse la tela, otro tenía una tía que era costurera y nos bordaron el trapo. Así comenzó la aventura”, cuenta.

Hoy por hoy, la Barra Petrolera cuenta con unas 80 personas “fijas” en todos los encuentros delocal. Además, poseen tres bombos y dos redoblantes, que con mucho sacrificio, adquirieron con su propio dinero, “ayudados con potazos que también hemos hecho nosotros”, dice Urdaneta.

Solidaridad entre barristas

Sorprendentemente, y salvo la tensión regular que existe entre barra local y visitante, encontraron apoyo en algunos sectores.

“Cuando empezamos, éramos unas cinco o seis personas. Recuerdo una anécdota acá en el Pachencho en un juego contra el Deportivo Táchira, en el año en que ellos quedaron campeones con Jorge Luis Pinto. Vinieron muchísimos fanáticos aurinegros. Uno de ellos me dijo: ‘Si vas a comenzar algo, termínalo. No vayas a hacer algo malo ni a medias. Todo inicio es duro, nos damos cuenta que son muy pocos, pero todos empezamos así’”, recordó.

Si bien ya son alrededor de 100, Urdaneta cree que se puede hacer mucho más. “Apenas tenemos tres años, pero nos ha costado mucho crecer. Todos queremos al equipo. No estamos pendientes de resultados, sino que siempre venimos a alentar en las buenas en las malas”.

Otro de los barristas, Nelson González, destacó que el único requisito para unirse a la barra es ir domingo a domingo a los juegos en casa y tener toda la disposición de alentar desde la sur. “Nuestra meta es apoyar al equipo para que se mantenga en primera y crecer un poco más, que todo Maracaibo se identifique con estos colores, con este escudo y que disfrute el buen fútbol que tiene el Zulia FC”, apuntó.

Cultura de ídolos

Entre 8-10 trapos grandes ha colocado la Petrolera, calcula González, varios de ellos dirigidos hacia los ídolos de la corta existencia del Zulia FC.

“Luigi Cassiani, un colombiano que desde que llegó hizo ruido. Henry Palomino, siempre presente. Gustavo Rojas y Eder Hernández, los dos grandes ídolos del Zulia FC”, enumera Nelson al ser cuestionado sobre los jugadores “emblema” del club.

González elogió a la gerencia anterior, con la que comenzó el equipo, y la actual, que maneja hoy las riendas. “La directiva anterior empezó de cero. Esta ha puesto más dinero y jugadores de renombre, y la primera armó un grupo interesante con piezas importantes”.

Entre las metas de la barra está en primera instancia, según cuenta González, alentar al equipo hasta llevarlo en un futuro no tan lejano al octogonal pre-suramericana.

“Esperamos que se logre, que los jugadores suden la camiseta como nosotros sudamos acá. Sé que aún no hemos visto la mejor versión del Zulia FC y lo mejor está por venir”, subrayó.

“Una de nuestras metas es crecer. Que vengan niños al estadio con sus padres todos los domingos, que quieran estos colores”, afirmó el líder barrista.

Colores y tradición

La influencia de la novel barra se dejó sentir en el seno del equipo cuando; con conversaciones, reuniones y mucha presencia en las redes sociales, consiguieron que se realizara una encuesta para ver qué colores prefería el fanático que el club vistiera en su camiseta.

“Nos llenó de orgullo porque nos dimos cuenta de que, aunque seamos poco, tenemos peso. Nos tomaron en cuenta. Este equipo, sin nosotros, no sería lo que es ahora”, comentó Urdaneta.

El azul y el negro siguieron siendo la esencia de la equipación “petrolera”, con un vivo rojo incluido.

Así, la Barra Petrolera hace vida cada dos semanas en el mítico “Pachencho” Romero cantando, alentando, tocando y, por supuesto, esperando que cada semana se unan más y más fieles seguidores del fútbol marabino a su iniciativa.